Comienza la vendimia en Madrid, en la Bodega Las Moradas de San Martín, con buenas previsiones de producción y calidad
*Mamen Crespo*
Madrid ya está vendimiando. Esta semana ha comenzado la recolección de la uva, con la variedad albillo real.
En concreto, se ha iniciado en la Bodega Las Moradas de San Martín, que ha comenzado la campaña 2025 en fechas similares a las de años anteriores.
La albillo real es una variedad autóctona, conocida como “tempranal” por su pronta maduración, y marca el arranque de una cosecha que se prevé de excelente calidad y ligeramente superior a la del año pasado.
Las condiciones climatológicas han sido determinantes en el ciclo de la vid. Un otoño cálido, un invierno suave con algunas heladas y una primavera fresca y lluviosa han dado lugar a racimos sueltos y de bajo peso.
Según Isabel Galindo, enóloga y directora técnica de la bodega, “el albillo real floreció a primeros de junio, con bastante corrimiento por las lluvias y el viento”. El inicio de agosto cálido ha acelerado la maduración, permitiendo comenzar la vendimia en fechas similares a las del año anterior.
La vendimia en Las Moradas se realiza de forma manual, en cajas pequeñas, por personal especializado del Departamento de Viticultura.
Comienza al amanecer, a las cinco de la mañana, para preservar la calidad de la uva. Se lleva a cabo una cuidadosa selección de racimos en campo y en mesa, antes de que entren en bodega, garantizando así el respeto por el fruto y su estado sanitario.
PROCESO MANUAL Y ARTESANAL
Todo el albillo real se cultiva mediante viticultura ecológica, con procesos manuales y artesanales que aportan autenticidad y calidad.
Las Moradas trabaja desde 1999 en la recuperación de esta variedad casi perdida, cultivada en parcelas de altura y terruños especiales, en formación de vaso y secano. Estas condiciones confieren al vino un carácter único, ligeramente oxidativo y muy gastronómico.
Actualmente se trabajan 6,3 hectáreas de albillo real, con un rendimiento estimado de entre 17.000 y 20.000 kilos. “Será una vendimia corta, con una producción equilibrada y excelente estado sanitario”, señala Galindo. La filosofía de la bodega se mantiene firme: elaboraciones reducidas, respetuosas y artesanales, que destacan por su marcado carácter varietal.
La añada 2025 promete vinos redondos y aromáticos, fruto de un ciclo climático complejo pero favorable.
LA TINTA GARNACHA, PARA LA SEGUNDA QUINCENA DE AGOSTO
Esta primera vendimia finalizará en aproximadamente una semana, y dará paso a la garnacha tinta, que también podría adelantarse. “En función de cómo continúe agosto, nuestras garnachas estarán listas en la segunda mitad del mes”, explica Galindo.
Las parcelas de altura sobre suelos graníticos auguran una gran calidad para esta variedad.